Click acá para ir directamente al contenido

Chile participa de la Feria Internacional del Libro de Cuba

En su 24ª edición nuestro país aportó con distintas actividades para celebrarla.

Miércoles 4 de Marzo de 2015

Entre el 12 y el 22 de febrero se desarrolló la 24ª edición de la Feria Internacional del Libro de La Habana, en Cuba. Chile no estuvo ausente. El Embajador de Chile en ese país, Gonzalo Mendoza, destacó la importante participación de la delegación de la Corporación Cultural de Antofagasta PAR, la presentación de la edición cubana del libro “La contadora de películas” del escritor Hernán Rivera Letelier, y un homenaje en el Programa de la Feria al escritor Pedro Lemebel.

La Corporación Cultural de Antofagasta PAR realizó durante una semana varias actividades culturales, entre ellas, talleres de pintura, talleres de teatro, y talleres de música y escritura en las comunas habaneras La Lisa y Regla.

El artista visual de esa región, Luis Núñez, pintó un mural en una plaza de la comuna de La Lisa, en conjunto con niños y jóvenes del municipio, a fin de realzar un espacio público por el cual circula gran cantidad de personas de esa comuna. Éste representa los símbolos que los niños del municipio identificaron como propios de su país, y la amistad que une a los pueblos de Chile y de Cuba.

La compañía de Teatro “La Huella” –también parte de la delegación de la Corporación PAR- además de los talleres dictados en las comunas de La Lisa y Regla, presentó la obra “Partir” en la Fábrica de Arte Cubano, el espacio multidisciplinario de más alto nivel que existe hoy en Cuba para presentaciones de compañías jóvenes e innovadoras.

El día 19 de febrero, el escritor Hernán Rivera Letelier presentó su libro: “La contadora de películas”, en el Morro Cabaña, el cual fue editado por una editorial cubana a la cual el escritor cedió sus derechos de autor, a fin de hacer accesible la obra al público cubano. En la ocasión, el escritor nacional aseveró que dispondrá la cesión de derechos de cada una de sus novelas para que se editen una por año en Cuba, como muestra del aprecio y cariño que manifestó sentir por el pueblo cubano. Como es de conocimiento, esta es la segunda novela del autor editada en Cuba, la cual fuera precedida por “La Reina Isabel cantaba rancheras”.